¿Estás de reformas? ¿Has pensado alguna vez en cambiar el suelo de tu casa? El suelo es una parte esencial de tu hogar o negocio y la elección del tipo de pavimento puede ser complicada. ¿Has pensado en las posibilidades que te ofrece el suelo laminado? El suelo laminado es muy versátil y fácil de instalar, por ello es una opción cada vez más popular a la hora de hacer reformas. En este artículo te contamos todo sobre las calidades del suelo laminado para ayudarte a elegir el más adecuado para ti.
¿Qué es el suelo laminado?
Los suelos laminados están compuestos de varias capas (láminas) de diversos materiales sintéticos. Precisamente recibe su nombre por su composición a base de una sucesión de láminas.
La primera capa del suelo laminado, está hecha con una base foam, seguidamente se encuentra una contra placa cuya función es evitar que las distintas láminas se torsionen, a continuación se encontraría la capa decorativa y en último lugar, un recubrimiento transparente que suele tener una alta resistencia a la abrasión. Es precisamente esta última capa la que diferenciará el tipo de suelo según su nivel de resistencia.
¿Qué significa suelo laminado AC?
Si quieres saber el nivel de resistencia de un tipo determinado de suelo laminado, deberás fijarte en su AC. Las siglas AC se corresponden con el término Abrasion Class, o lo que es lo mismo, Criterio de Abrasión. El criterio de abrasión es una de las calidades que determina el suelo laminado.
Este criterio es un método estándar cuya función es identificar el desgaste del suelo. Su clasificación abarca 6 categorías: desde AC1 hasta la AC6, elegir una u otra dependerá del uso que le vayas a dar a tu pavimento. Lo más común es encontrar suelos laminados de categoría AC3 en adelante.
A continuación, te detallamos cada una de las categorías AC para que veas sus diferencias y saber cuál es el suelo laminado que mejor se adapta a tus necesidades
¿Cómo se define la clasificación de la tarima?
Antes de entrar en detalles, tienes que saber que cada tipo de suelo laminado es sometido a un test llamado Tabber para comprobar su resistencia. Dicho test se realiza mediante una máquina que posee un rodillo con lija. El mecanismo es sencillo. El rodillo va girando sobre el suelo ejerciendo cierta presión. Dependiendo de la cantidad de vueltas que el suelo pueda resistir antes de que se desgaste la lámina decorativa, se clasificará dentro de una categoría específica de AC.
Según el número de vueltas que resista, la clasificación AC quedaría de la siguiente manera:
- Si da más de 900 vueltas, se clasifica como AC1
- Más de 1.800 vueltas = AC2
- Más de 2.500 vueltas = AC3
- Más de 4.000 vueltas = AC4
- Más de 6.500 vueltas = AC5
- Más de 8.500 vueltas = AC6
Las categorías más utilizadas actualmente son las de AC4, AC5 y AC6. Ahora bien, llegados a este punto, seguramente estés pensando que el mejor suelo laminado es aquel que tenga mayor resistencia. Sin embargo, esto no es del todo cierto. Dependiendo del uso que quieras darle al suelo, será recomendable una resistencia mayor o menor en términos de AC.
Suelos laminados AC1 y AC2
Los suelos laminados con calidades de tipo AC1 y AC2 son los menos resistentes del mercado. Y aunque cada vez se fabrican menos, este tipo de suelo son perfectos para espacios poco transitados como pueden ser un pequeño depósito o una habitación de una sola persona. También son perfectos para salas de meditación donde generalmente se suele ir descalzo o es habitual el uso de esterillas.
Ahora bien, no solamente tendrás que tener en cuenta el tránsito de personas, también debes considerar el movimiento de objetos. Si tu intención es cambiar el suelo por uno de larga duración, las opciones AC1 y AC2 no son lo que estás buscando.
Suelos laminados AC3
Los suelos laminados de categoría AC3 tienen una resistencia considerable y están pensados para viviendas poco transitadas. Son perfectos para segundas residencias como las casas de verano y una de sus principales ventajas es el factor económico.
Sin embargo, si es habitual recibir visitas en tu casa o tienes mascota, este tipo de suelo no es el adecuado. Si este es tu caso, será mejor invertir un poco más en la calidad de tu suelo para que te dure muchos más años.
Suelos laminados AC4
La categoría AC4 es una de las más demandadas en el mercado. Su relación calidad-precio es genial para uso doméstico. Incluso será un suelo idóneo para tu negocio si cuentas con tránsito bajo o moderado.
En Paviservi encontrarás una gran diversidad de modelos y marcas de suelo laminado de categoría AC4 que, sin duda, harán que tu casa u oficina se vea sencillamente espectacular.
Suelos laminados AC5
Por su parte, los suelos laminados AC5, son ideales si en tu casa tienes alguna mascota, ya que su mayor resistencia hará que tu suelo luzca como el primer día durante mucho más tiempo. Lo mismo ocurre si estás acostumbrado a recibir gran cantidad de visitas, invertir en un suelo con mayor resistencia será la mejor decisión si te influyen alguno de estos factores.
También es uno de los más demandados si se trata de suelos para negocios. Su uso continuado hará que se desgaste con mayor facilidad. Por eso, si quieres alargar la vida útil del suelo laminado de tu negocio o local, las calidades de suelos laminado con categoría AC5 será la más acertada para ti.
Suelos laminados AC6
Por último, los suelos de categoría AC6 son los más resistentes del mercado. Están diseñados para espacios que dispongan de un tránsito muy elevado. Si tienes un restaurante, un hotel o una tienda de ropa este tipo de suelos laminados es el que estás buscando.
En definitiva, la elección del tipo de suelo dependerá del uso que le vayas a dar. Apostar por categorías de máxima resistencia como la AC6 no siempre es un acierto. Lo más aconsejable sería escoger tu suelo laminado entre las categorías AC4 y AC5.
Otras características de los suelos laminados según sus calidades
Supongamos que ya tienes claro el tipo de suelo laminado que quieres instalar considerando su nivel de resistencia, pero… ¿existen otros factores a tener en cuenta? Por supuesto, lo primero a considerar es el tipo de AC que queremos en nuestro suelo y una vez tengamos claro este paso, pasemos a los siguientes para conocer más sobre las calidades del suelo laminado.
El grosor de las láminas
Lo más común es que te encuentres con suelos laminados con grosores que oscilen ente los 6 y 12 mm. El grosor es importante, ya que, a mayor grosor del suelo, mayor será la estabilidad de este. ¿Y para qué quiero que mi suelo sea más resistente? En primer lugar, para una mayor duración, pero sobre todo, para evitar factores como las torsiones o la humedad no afecten a las láminas del suelo. Es importante tener en cuenta este tipo de calidades a la hora de escoger tu suelo laminado.
Por ponerte un ejemplo, si vas a colocar suelo laminado en un baño, donde la humedad es elevada, escoger un grosor bajo puede ser un gran error. Para estos casos, lo mejor es escoger un suelo con un grosor de 12mm.
La clase de suelo laminado según otras calidades
¿Te suenan las clases 21 o 32? Si has estado investigando sobre calidades de suelos laminados, seguramente te hayas encontrado con estos números. Su significado es sencillo. El primer dígito se refiere al ámbito en el que va a ser utilizado el suelo. El número 2 correspondería al ámbito doméstico y el número 3 al comercial. Luego, el segundo dígito, marca la calidad del uso. Cuánto mayor sea el uso del suelo, mayor deberá ser su categoría.
Con esto tendrías todos los factores a considerar sobre las calidades del suelo laminado para que elijas el suelo perfecto para ti. Solamente quedaría el diseño, pero ya lo dejamos a tu elección. En Paviservi, encontrarás suelos laminados de alta calidad que se adaptan perfectamente a tus necesidades.
Ahora que ya sabes todo lo necesario para escoger tu suelo laminado, ¿cuál eliges? 😉